El rápido crecimiento del East End creó la necesidad de un nuevo cruce. Un concurso público atrajo más de 50 diseños. Tras ocho años, en 1884 se eligió el concepto de basculante y suspensión de Sir Horace Jones, que resolvió el conflicto entre el tráfico rodado y el fluvial.

.jpg?auto=format&w=702.4499999999999&h=401.4&q=90&ar=7%3A4&crop=faces&fit=crop)









