Construcción del Tower Bridge
La construcción del Tower Bridge de Londres, una maravilla de la ingeniería y la arquitectura de la época victoriana, comenzó en 1886 y se terminó en 1894. Fue diseñado por dos destacados arquitectos, Sir Horace Jones y Sir John Wolfe Barry, que colaboraron en el proyecto. El Tower Bridge presenta una notable mezcla de estilos arquitectónicos, principalmente neogótico y victoriano.
La característica única del puente es su diseño basculante, con dos enormes torres conectadas por una pasarela de alto nivel. Los basculantes podían levantarse para permitir que los barcos altos navegaran por el río Támesis, manteniendo las rutas comerciales vitales. Es de acero y está revestido de bellos detalles góticos victorianos, que crean una estructura imponente y pintoresca.
El proceso de construcción fue una empresa monumental, en la que trabajaron miles de obreros y se utilizó mucha maquinaria de vapor. El resultado no es sólo un puente levadizo funcional, sino una obra de arte que se ha convertido en un símbolo emblemático del patrimonio arquitectónico y de ingeniería de Londres. Hoy, el Tower Bridge es un testimonio de la innovación y la artesanía de la época victoriana.