- Icónico donde los haya: El London Eye es la estructura más emblemática de la ciudad. Suele ser la cara de la capital inglesa y la prueba de su sorprendente arquitectura y su moderno paisaje.
- Impresionantes vistas: Gracias a su elevación, el London Eye ofrece unas vistas inmejorables de la capital inglesa y de su horizonte. El Big Ben, la Torre de Londres y el Palacio de Buckingham son visibles desde el London Eye.
- Abierto todo el día: El London Eye ofrece vistas diurnas y nocturnas del horizonte de Londres. Las vistas desde las cápsulas de observación son diferentes a la luz del día y a la luz de la luna, lo que convierte al London Eye en una atracción única.
- Una experiencia única: Varios lugares de Londres ofrecen vistas del perfil de la ciudad, pero el London Eye es único. Ver la ciudad desde una altura de 135 metros en una cápsula giratoria te dejará boquiabierto, y la experiencia se te quedará grabada para siempre.
- Magnífica ubicación: Situado en la orilla sur del río Támesis, el London Eye es accesible en transporte público. Puedes visitarlo cómodamente desde cualquier punto de Londres.